Criticado por Washington por violaciones a los derechos humanos, el gobierno de Cuba replica que Estados Unidos “no tiene derecho de dar lecciones a nadie”.
El gobierno cubano a su vez, denunció la “crueldad” del embargo contra la isla, vigente hace 60 años y cuyo impacto es “mayor que nunca”.
“Estados Unidos tiene una trayectoria nefasta en materia de respeto a los derechos humanos. Tiene una trayectoria nefasta en materia de derechos democráticos de su población. Estados Unidos no tiene derecho a dar lecciones a nadie”, dijo en una entrevista con AFP el viceministro de Relaciones Exteriores, Carlos Fernández de Cossío.
“Estados Unidos no tiene derecho a hacerlo, sobre todo no tiene derecho a manipular un tema tan sensible como el de los derechos humanos para atacar a países con los cuales tiene desacuerdos”, añade Fernández de Cossío. Sin embargo, admite que “todos los países, Cuba incluido, tienen mucho que mejorar en materia de derechos humanos”.
Sus declaraciones se producen cuando están por cumplirse 60 años del embargo estadounidense, decretado el 3 febrero de 1962. A su vez, en las últimas semanas, Washington redobló sus críticas ante los juicios y condenas contra manifestantes del 11 de julio de 2021.
“La libertad de expresión y el derecho a un juicio justo son derechos humanos universales que todos los países deben proteger y defender”, tuiteó el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols.
Esos son “pretextos falaces” utilizados para “intentar justificar una política que rechaza la comunidad internacional y una parte importante del pueblo de Estados Unidos”, advierte el viceministro, a cargo del Departamento de Estados Unidos de la cancillería cubana.
Hace una semana, la justicia cubana reconoció que más de 700 manifestantes fueron encausados, y que otros 172 ya fueron condenados. Sin embargo, dijo que en dichos procesos “se garantizó el derecho a la defensa” y “los abogados aportaron pruebas”.
La fiscalía subrayó que las manifestaciones de julio pasado, en las que miles de cubanos marcharon al grito de “Libertad” y “Tenemos hambre“, se registraron en un contexto de “recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de Estados Unidos”.
Las sanciones contra Cuba se multiplicaron durante el mandato de Donald Trump. Durante ese periodo se prohibió a los cruceros estadounidenses de hacer escala en costas cubanas.
A esto se sumaron amenazas de acciones legales contra las empresas extranjeras que operan en la isla y su inclusión en la lista de países promotores del terrorismo.
“El grado del cerco económico y la capacidad de Estados Unidos para ejercerlo es mayor que nunca”, afirma Fernández de Cossío.
Cactus24 31-01-22