Claudio Formenton, empresario italiano, vivió días de terror, puesto que terminó siendo secuestrado el pasado 27 de noviembre después de un viaje que emprendió rumbo a Costa de Marfil, donde lo estaba esperando una mujer a quien conoció por Internet.
Le dijo a sus familiares y amigos que iba a África para realizar labores humanitarias. Sin embargo, su viaje era para encontrarse con una supuesta joven local, Olivia Martens, a la que había conocido en internet.
A la mujer solo la conocía por fotos. Se deduce que ni siquiera existía realmente, según las autoridades. Pero fueron suficientes sus frecuentes conversaciones en chat para enamorar a Claudio hasta el punto de emprender un viaje hacia otro continente y querer verla en persona.
Todo parecía ir normal, hasta que llegó al aeropuerto. Allí fue donde un taxista lo estaba esperando con un cartel con su nombre, siendo más tarde secuestrado.
El secuestro del empresario
Fueron tres días en que desconocidos lo mantuvieron escondido en varios lugares, siendo el hotel de Bonoua el último de ellos. Incluso, los secuestradores habían exigido un rescate a su familia, pero todo quedó atrás, ya que la policía intervino su teléfono y logró ubicarlo con vida.
Los fiscales creen que la mujer a quien Formenton iba a visitar -y quien supuestamente se llamaba Olivia – actuó como carnada para que se llevara a cabo el objetivo de los criminales, puesto que la mujer le había pedido ayuda económica al empresario.
Tras dar con su paradero, la policía le consiguió un vuelo al empresario, quien regresó a Italia, estable, aunque aún afectado emocionalmente por el violento episodio que vivió.
Debido a que fue necesaria la movilización de diversas autoridades, el empresario ahora deberá explicar los pormenores de su decepcionante aventura.
En tanto, en su municipio de Fossò, en Véneto, Claudio Formenton ha enviado agradecimientos a las fuerzas del orden, y ha expresado mediante su abogado el deseo de reposar.
Cactus24//14-01-2022