Las autoridades peruanas dejaron en libertad a los 41 venezolanos cuya deportación tuvo que ser suspendida después de que las autoridades venezolanas no autorizasen el ingreso a su espacio aéreo del avión que debía transportarlos, según informó este miércoles el ministro del Interior, Avelino Guillén.
En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, el titular de la cartera de Interior confirmó que los 41 venezolanos, entre ellos 31 hombres y 10 mujeres, ya se encuentran en libertad al no poder mantenerlos detenidos por más tiempo sin una orden judicial.
Guillén afirmó que todos los integrantes de esta deportación contaban con una resolución de expulsión por parte de la Superintendencia Nacional de Migraciones al haber mentido u ocultado información para obtener su permiso de residencia.
Entre ellos había 18 que presuntamente ocultaron que tenían antecedentes penales en Venezuela por diversos delitos, «lo que es una causa directa de expulsión», remarcó Guillén, aunque ya hayan cumplido sus penas por esas infracciones a la ley.
Sin embargo, el ministro reconoció que ninguno de los detenidos presentaba antecedentes penales por delitos cometidos durante su estancia en Perú.
Las autoridades aeronáuticas de Venezuela no cedieron en su negativa a recibir el vuelo pese a las «insistentes comunicaciones» que el Ministerio de Relaciones Exteriores realizó a sus pares venezolanos.
Incluso el propio presidente de Perú, Pedro Castillo, quien había acudido a presenciar junto a Guillén el frustrado embarque al avión de los venezolanos deportados, trató de comunicarse sin éxito con su homólogo, Nicolás Maduro.
Esta comunicación se logró aparentemente en la tarde, de acuerdo al ministro, quien aún no tenía el detalle de la conversación supuestamente sostenida por Maduro y Castillo respecto a este asunto.
Durante la última campaña electoral, el izquierdista Castillo fue electo presidente con un discurso hostil contra la inmigración e incluso prometió que daría 72 horas a los extranjeros «delincuentes» para abandonar el país una vez que asumiera el mando en julio, algo que finalmente nunca se llegó a aplicar.
Perú es el segundo país con mayor presencia de venezolanos al haber acogido a 1,2 millones de los cerca de seis millones que en los últimos años abandonaron Venezuela por la grave crisis económica que atraviesa el país.
Uno de cada seis migrantes venezolanos llegó a Perú, una tasa solo superada por Colombia, que acoge a 1,8 millones de venezolanos, según los últimos datos de la Plataforma de Coordinación para los Migrantes y Refugiados de Venezuela, liderada por Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM)./Agencias.
Cactus24 (23-12-2021)