El Tribunal Supremo de EEUU autorizó a las clínicas a seguir practicando abortos, a pesar a la ley de Texas que prohíbe la interrupción del embarazo luego de la sexta semana de gestación.
La Corte Suprema, sin embargo, no ha decidido que la ley texana quede sin efecto en su totalidad.
Esta decisión permite que las clínicas sigan desafiando la legislación del estado y que se sigan dirimiendo las demandas en cortes inferiores.
Cactus24 10-12-21