El Gobierno español acordó este martes llevar a cabo la derogación de la reforma laboral aprobada por el anterior Ejecutivo conservador del Partido Popular (PP), tras días de tensión entre los socios de la coalición gubernamental formada por socialistas y Unidas Podemos.
La reforma laboral del PP, aprobada durante la anterior crisis económica que, entre otras cosas, incrementó el empleo precario y redujo la representación de los trabajadores en las pequeñas empresas, se convirtió en los últimos días en un punto de fricción en el gobierno de coalición progresista español.
Las diferencias se personificaron en la vicepresidenta primera y ministra de Economía, la socialista Nadia Calviño, que quería supervisar la última etapa de la negociación con los agentes sociales, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, de Unidas Podemos, que dirigió hasta ahora todas las conversaciones.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, mantuvo hoy una reunión con ambas, donde el Ejecutivo se comprometió a la derogación de la reforma laboral en los términos del acuerdo de coalición y el Plan de Recuperación enviado a la Comisión Europea, según informó el Gobierno.
«El Gobierno busca, a través del diálogo social, un acuerdo con todas las partes justo y equilibrado», añade el comunicado, que insiste en que el Ejecutivo cumplirá «con la palabra dada».
En este objetivo, el Gobierno apuesta por una legislación laboral «moderna» que revise los «desequilibrios» de la reforma de 2012 y «deje atrás» los problemas estructurales del mercado de trabajo.
Tradicionalmente, Calviño vela por que el Ejecutivo mantenga la ortodoxia económica marcada por la Unión Europea, mientras que a Díaz ha defendido su derecho, como ministra de Trabajo, a pilotar la negociación.
Unidas Podemos insistió durante todos estos días en que era imprescindible la «derogación» de la reforma laboral, mientras desde los socialistas utilizaban otros términos más genéricos como «modernizar» el mercado de trabajo.
Esta polémica entre socialistas y Unidas Podemos, provocó los momentos de más tensión en el Gobierno de coalición, que ya han chocado con otros asuntos como la reforma de la ley de vivienda, en la que Unidas Podemos quería poner topes al alquiler, o la subida del impuesto de sociedades a las grandes empresas.
No obstante, ambos socios insisten en que la coalición, establecida en 2020, está fuerte y se mantendrá hasta el fina de la legislatura en 2023.
Cactus24 02-11-21