Más de 150 venezolanos que entraron de forma irregular en Trinidad y Tobago fueron deportados a su país después de soportar «condiciones cuestionables», según denunciaron este martes en conferencia de prensa activistas de derechos humanos.
Yesenia González, activista en defensa de los derechos de los venezolanos en Trinidad y Tobago, señaló que los más de 150 deportados, incluidos 25 niños y varias mujeres, fueron enviados de vuelta a su país el sábado por la noche en condiciones que catalogó de inhumanas. «La mayoría habían sido detenidos tratando de entrar en Trinidad y Tobago de forma irregular», dijo.
González indicó que 32 de los deportados habían llegado en las últimas semanas y fueron detenidos luego de entrar al país por Mayaro, un municipio de la costa este de la isla de Trinidad.
«Las autoridades detuvieron a estas personas en una comisaría que no estaba en condiciones para atenderlos, especialmente a niños y mujeres», sostuvo la activista. Posteriormente, el grupo fue trasladado al helipuerto de Chaguaramas, donde permanecieron varios días hasta que fueron enviados de vuelta a Venezuela. Entre los deportados se encontraban varias personas que habían sido detenidas en diversos operativos policiales.
González dijo sentirse «decepcionada y sorprendida», debido a que no hay avances en las denuncias de violaciones de derechos humanos contra los inmigrantes venezolanos.
Dijo que en una reunión entre representantes de la comunidad venezolana en Trinidad y Tobago y el ministro de Seguridad Nacional, Fitzgerald Hinds, hace unos meses, plantearon la necesidad de evaluar las formas y condiciones en las que se trata a los inmigrantes detenidos. «No existen lugares adecuados para atender a los niños que huyen con sus padres de los problemas de su país», denunció.
«No son delincuentes comunes que deban estar encerrados en una celda. Merecen un mejor trato como seres humanos y evaluar sus casos», argumentó.
Este caso ha sido tratado de forma muy opaca por las autoridades de Trinidad y Tobago, por lo que se sabe poco sobre el proceso de repatriación, excepto que un barco debía llevar a los deportados al puerto de Guiria, en la costa este de Venezuela. Los colectivos venezolanos en Trinidad y Tobago señalaron la poca colaboración de Hinds para informar sobre la deportación de este grupo.
Los venezolanos han estado acudiendo en masa durante los últimos meses a la vecina Trinidad y Tobago, coincidiendo con la inestabilidad política y social en su país. Las autoridades de Trinidad y Tobago repatriaron el pasado julio a más de 650 venezolanos a su país.
En mayo de 2019, cerca de 16.500 ciudadanos venezolanos cumplieron con un proceso de registro impuesto por el Gobierno que les permitió trabajar y vivir legalmente en Trinidad y Tobago.