Nina Farooqi, es una aficionada inglesa que perdió su trabajo por ir a la semifinal de la Eurocopa entre Inglaterra y Dinamarca en Wembley el pasado miércoles.
El problema en si no fue que asistiera al compromiso, el tema fue que las cámaras de la televisión la captaron celebrando el gol con el que empató Inglaterra, y así se expuso a que su jefe, con quién se había reportado enferma, la cachara en su mentira.
La aficionada inglesa de 37 años fue invitada por una amiga a este encuentro y al pensar que su jefe no le daría permiso para faltar, le habló para informarle que no asistiría a trabajar debido a que estaba enferma.
La fotógrafa viajó desde Leeds a Londres, un lugar donde todo cambiaría, pues nunca pensó que su efusivo festejo sería transmitido por las cámaras de televisión, imágenes por las que fue reconocida por varios amigos hasta por su propio jefe.
La felicidad se desvaneció cuando a las 6 de la mañana su jefe le llamó para decirle que no regresara al trabajo. Y aunque muchos sentirían culpa ante lo ocurrido, ella aseguró que hubo «poco arrepentimiento», pues lo volvería a hacer.
«Hay un poco de arrepentimiento, nadie quiere que lo despidan, pero también habría odiado el arrepentimiento de perderme un evento así. Lo volvería a hacer», mencionó Nina para el diario Daily Telegraph. Farooqi comentó que sus jefes fueron poco empáticos con lo sucedido, ya que a pesar de haberles dado una explicación solo le dijeron que «estaba despedida».
Agregó que «son emociones encontradas: hemos llegado a la final, todavía estoy en una nube por eso, pero también soy consciente de que he perdido mi trabajo».
Cactus24/12-07-2021
