El grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que estudia las vacunas contra la COVID-19 está terminando su análisis de las desarrolladas en China por las firmas Sinovac y Sinopharm, y en los próximos días podría confirmar si autoriza o no su uso de emergencia, según informó este miércoles.
El mexicano Alejandro Cravioto, presidente del Grupo de Expertos para Asesoramiento Estratégico (SAGE) que emite recomendaciones sobre el uso de vacunas anticovid a la OMS, señaló que las dos vacunas están en «proceso final de análisis» y podrían pronto ser incluidas en la lista de uso de emergencia del organismo.
«Las informaciones que las dos compañías han compartido públicamente la semana pasada en la última reunión de SAGE indican claramente que las vacunas tienen niveles de eficacia compatibles con los requisitos de la OMS», subrayó el experto en rueda de prensa.
Cravioto puntualizó que muchos países ya están usando estas vacunas, dado que la lista de emergencia de la OMS principalmente se dirige a países que no tienen organismos reguladores del sector farmacéutico.
Moderna y Sputnik
Aunque el presidente de SAGE no señaló cuándo podría llegar la recomendación, la lista de vacunas contra la COVID-19 estudiadas por la OMS, facilitada hoy a los periodistas en la rueda de prensa, indica que la decisión podría hacerse pública en los primeros días de abril, también en el caso de la fabricada por la estadounidense Moderna.
Otra vacuna, la Sputnik V del laboratorio ruso Gamaleya, también se encuentra en fase de estudio de los expertos de SAGE, aunque éstos han solicitado a Rusia más datos antes de poder emitir su recomendación.
Por ahora, la OMS autoriza el uso de emergencia de las vacunas anticovid de Pfizer-BioNTech, Janssen (Johnson & Johnson) y AstraZeneca (en este último caso, sólo las remesas fabricadas en asociación con la surcoreana SK BIO y el Instituto Serológico de la India).
La inclusión de vacunas en la lista de la OMS es importante también porque las autorizadas por el organismo internacional pueden entonces formar parte del programa COVAX de distribución de dosis a países en desarrollo.
Por ahora, la mayor parte de los más de 30 millones de vacunas que ha distribuido la OMS mediante este programa son fabricadas por AstraZeneca en India y Corea del Sur.
(Con información de EFE)