Indefensa quedó Solange María García Silva, de 11 años, luego de la inesperada muerte de su madre y su abuela. Su padre, Javier García, debió asumir sus cuidados, pero la condujo a un cuadro depresivo que la llevó a suicidarse en su casa, en la calle 24 del barrio Ma’Vieja, parroquia El Bajo del municipio San Francisco. La necropsia develó el abuso sexual del que era víctima la niña desde hace semanas.
La Policía científica asumió la responsabilidad de la investigación e inició nuevamente los interrogatorios tras los nuevos hallazgos. Regresaron a la vivienda y requisaron las pertenencias de García, en su celular encontraron pornografía infantil e imágenes de su hija. Inmediatamente lo aprehendieron.
El resto de la familia simplemente alegó que García se encerraba con frecuencia con la niña en la habitación. Pero por ser su padre no se preocuparon.
No es el único caso que se ha reportado en la región, dónde las víctimas de violación terminan atentando contra su vida. En agosto de 2019, una niña, de 12 años, terminó abruptamente con su existencia luego de que su padre, Giuseppe Luciano Herrera (53); y su tío, Henry de Jesús Herrera (61), abusaran de ella.
El llamado de las autoridades es a denunciar cualquier irregularidad que observen en los niños y adolescentes. Una atención psicológica a tiempo puede ayudarlos a superar el episodio y salvar su valiosa vida. Además de que les permite a los oficiales detener a los responsables.
Cactus24/14-03-2021