El español Fernando Alonso fue el gran ausente este martes de la presentación virtual del nuevo monoplaza de la escudería Alpine, con el que regresará a la Fórmula Uno la próxima temporada con el objetivo de “mejorar como piloto”.
“Aprendí mucho de estos dos años fuera del deporte y quiero consolidar esas experiencias y aplicarlas a la Fórmula Uno”, explicó el campeón del mundo de 2005 y 2006 en unas declaraciones distribuidas por el equipo.
Alonso se recupera de un accidente que sufrió en Suiza, pero el equipo Alpine, que desveló el coche con el que participará, se mostró convencido de que el español estará en los entrenamientos programados en Baréin dentro de diez días.
El piloto aseguró que en estos años, en los que ha participado en carreras de resistencia e, incluso, en el rally Dakar, ha podido conocer “diferentes filosofías, técnicas de conducción y ética laboral”, que espera aplicar de nuevo a la Fórmula Uno.
Señaló que en estos dos últimos años se convirtió “en un piloto más completo” porque salió de su “zona de confort”.
Alonso regresa al Alpine, la nueva denominación que tendrá el equipo Renault, que ha querido así relanzar una marca de coches deportivos de su propiedad.
“Logramos tanto juntos en el pasado que nuestras vidas están unidas para siempre”, indicó el español, que ganó sus dos mundiales con la marca del rombo.
Agregó que es consciente de que el nuevo coche es una evolución del de la anterior temporada, en la que lograron algún podio con el francés Esteban Ocon, pero lo asume como “una oportunidad de tener una base para progresar para el futuro”.
Aunque reconoció que necesitará, al menos, dos carreras para encontrar su mejor nivel, Alonso confesó que tiene en su mente algunos Grandes Premios, como los de España, Francia, Mónaco o Japón.
A sus 39 años, Alonso aseguró que no teme sentirse en desventaja con la ascendente nueva generación: “No corro contra nadie pensando en su edad o en las carreras que ha hecho. Además, para ser honesto, los mismos pilotos que dejé en 2018 en la cima siguen ahí, así que conozco bien a mis rivales”.
La llegada de Alonso fue aplaudida por todos los responsables del equipo, incluido el nuevo consejero delegado de Renault, Luca di Meo, que aseguró que el español aportará “su rapidez, experiencia y talento” y que se mostró “orgulloso” de tenerlo en su equipo.
El nuevo monoplaza llevará los colores azul, rojo y blanco, con los que pretenden destacar la bandera francesa y la británica, para rendir homenaje a las dos almas del equipo, una basada en Viry y la otra en Enstone.