Los residentes de la ciudad filipina de Sibonga fueron testigos de un doble milagro de Navidad el año pasado, gracias a un cuidadoso motociclista y a un perro que de repente empezó a ladrar sin parar.
Junrell Fuentes Revilla, de 36 años, iba en su moto cuando un perro callejero negro empezó a ladrarle. Él motociclista se detuvo para prestarle atención al mensaje del perro, quien lo dirigió hacia un bulto cerca de un vertedero de basura.
El bulto resultó ser un bebé recién nacido que dejaron abandonado envuelto en una toalla, estaba llorando, con el cordón umbilical y la placenta todavía pegados, reportó Cebu Daily News.
La mascota encontró al pequeño en un terreno baldío. En lugar de hacerle daño, el can salió hasta la carretera para llamar la atención de algún transeúnte o conductor de transporte.
El bebé está a salvo y bajo el cuidado de la Oficina Municipal de Bienestar y Desarrollo Social, mientras las autoridades aún buscan a algún familiar.
La ONG local Stay for Dogs más tarde rastreó al perro y descubrió que no era un perro callejero como se informó inicialmente, sino un cachorro de 18 meses que pertenece a un hombre llamado Kuya Lyndon Olingay.
La Policía de Sibonga compartió imágenes en su cuenta de Facebook del can que ayudó a rescatar al bebé.
Cactus24/23-01-2021
