El Tribunal del Vaticano anunció hoy la apertura «inminente» del juicio contra la italiana Cecilia Marogna, acusada de malversación de los fondos que recibió del cardenal Angelo Becciu, defenestrado por el papa Francisco, tras algunos escándalos financieros.
En una nota, el Tribunal vaticano confirmó que, «aceptando la solicitud formulada por la Fiscalía, revocó las medidas cautelares en el momento ordenadas contra la señora Cecilia Marogna, contra quien se abrirá la inminente celebración de un juicio por presunta malversación y de otros delitos».
La iniciativa, explicaron, pretende, entre otras cosas, permitir que la acusada participe en el juicio en el Vaticano, «libre de la medida cautelar pendiente».
Durante la vista de hoy en el Tribunal de Milán, en la que se tenía que emitir un veredicto sobre la petición de extradición emitida por el Vaticano –y por la que Marogna fue detenida el pasado 13 de octubre–, se leyó la petición de «no procede» por parte de la Justicia de la Santa Sede.
Tras su detención, Marogna había quedado después en libertad en espera de que se resolviese el proceso de extradición.
La empresaria sarda se había acreditado ante el cardenal Becciu, en su momento adjunto en la Secretaría de Estado, como experta en política exterior.
Según las informaciones aparecidas en los diarios Domani y el Corriere della Sera, cuando en su pesto era poderoso Becciu (2011-2018), entregó unos 500.000 euros a Marogna, titular de una empresa con sede en Eslovenia, y experta en seguridad y relaciones internacionales, para que realizase una red de protección de algunas nunciaturas.
Una investigación del programa televisivo «Le Iene» del canal «Italia1» desveló que parte de este dinero, cerca de 200.000 euros, fue utilizado en la compra de artículos de lujo, como 12.000 euros por un sofá, 2.200 por un bolso de Prada más otros 1.400 por uno de Tod’s y 8.000 por otro de Chanel.
Este fue uno de los capítulos que ha ido filtrando la prensa sobre la gestión de Becciu antes de que, por sorpresa, Francisco le retirara el pasado 24 de septiembre de su cargo de prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos y también de sus derechos como cardenal, quizá pensando en un futuro proceso.
Respecto al posible enjuiciamiento de Becciu, el semanal italiano «L’Espresso» y el diario «Domani» aseguraron que el cardenal está siendo investigado por la fiscalía vaticana por malversación de fondos, dirigidos éstos a empresas de sus hermanos y también se habría añadido entre los cargos el caso del dinero entregado a la sociedad de Marogna y su falta de supervisión./EFE