El presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, culpó este miércoles a su vicepresidente, Mike Pence, del caos en Washington por no haberse arrogado poderes que no le otorga la Constitución, mientras sus seguidores asaltaban el Capitolio y conseguían entrar.
Trump, que se encontraba en el Despacho Oval mientras sus simpatizantes irrumpían en el Capitolio y entraban en el hemiciclo de la Cámara de Representantes, no pidió a sus seguidores que abandonaran el Congreso y, en cambio, alimentó las tensiones que provocaron el asalto.
Entretanto,
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, afirmó que la violencia y la destrucción en el Capitolio deben detenerse y pidió a los simpatizantes del presidente Donald Trump que que están dentro del edificio del Congreso a que salgan «inmediatamente» de ese lugar.
A través de Twitter, advirtió que «la protesta pacífica es un derecho de todos los estadunidenses, pero este ataque a nuestro Capitolio no será tolerado y los involucrados serán procesados con todo el peso de la ley».