La ministra de Interior, Justicia y Paz, Carmen Meléndez informó que tras acuerdos previos con representantes de diferentes religiones, se acordó el retorno de los feligreses a partir de este primero de noviembre, bajo medidas de bioseguridad.
Precisó que el uso de las mascarillas, aplicación de gel antibacterial, lavado obligatorio de las manos, toma de temperatura, desinfección de los calzados y distanciamiento social serán de carácter obligatorio para el ingreso de los ciudadanos a los templos, donde además solo se permitirá un aforo del 40%. A esto se suma la desinfección de los espacios, de acuerdo a información suministrada por Unión Radio.
«De domingo a domingo de la semana de flexibilización todos pueden ir, los que cumplan las medidas de protección, a su iglesia. También puede ser al aire libre donde pueden hacer estas oraciones», reiteró.
Meléndez dijo que las autoridades se reunirán nuevamente con los representantes religiosos en 30 días, «para hacer el seguimiento y control» para evaluar un posible incremento del aforo.