La estadounidense Serena Williams, que este lunes pasó a los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos, se expresó en descuerdo con las medidas anunciadas por los organizadores del Roland Garros, entre ellas que todos los jugadores tendrán la obligación de alojarse en dos hoteles pese al hecho de que habrá público en las gradas.
«Si va a haber fans, entonces deberíamos quedarnos en otro sitio», dijo la exnúmero uno en una rueda de prensa después del encuentro de Flushing Meadows en la que afirmó que ella esperaba poder hospedarse en su apartamento de París.
Cactus24 08-09-20