La cifra de muertes a causa del coronavirus en Estados Unidos alcanzó las 150.000 el miércoles, por mucho la más alta en el mundo, de acuerdo con el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
La sombría marca surge en medio de señales de que el brote de la nación empieza a estabilizarse en el Cinturón del Sol —que comprende la franja sur del país— pero se está acelerando en la región centro-norte, avivado en gran medida por los adultos jóvenes que están regresando a los bares, restaurantes y gimnasios.
El repunte ha estado acompañado por un creciente brote de desinformación y teorías de conspiración sobre supuestas curas y la efectividad de las mascarillas.
Brasil tiene la segunda cantidad más alta de muertes por país, con 88.000, seguido por Gran Bretaña con 46.000 y México con más de 44.000.
La Universidad Johns Hopkins computó los casos confirmados de coronavirus en Estados Unidos en casi 4.4 millones, también la cantidad más alta en el mundo, aunque se cree que las cifras reales en Estados Unidos y en el mundo son mucho mayores debido a la cantidad limitada de pruebas y los muchos casos con síntomas leves que no se han detectado o reportado.
