Desde la implementación del plan de desconfinamiento en Venezuela, el primero de junio, pese a que la flexibilización se ha realizado de forma parcial (con horarios restringidos y para ciertos sectores económicos), en su primera semana el incremento de nuevos casos ha alcanzado niveles sin precedentes, según las estadísticas presentadas por las autoridades, reseña Torino Economics en su más reciente informa sobre Venezuela.
Añaden que en los primeros siete días de la flexibilización y aumento de la gasolina, se han reportado 867 nuevos casos, lo que representa el 36,5% de los casos totales al 7 de junio, según el portal Banca y Negocios.
Torino Economics indica que en medio de una fuerte escasez de gasolina, luego del anuncio del incremento en el precio del combustible en 83.233% (a precio subsidiado) y 1.613.583% (a precio internacional), de acuerdo a la modalidad del servicio, en los primeros días de distribución se presentaron dificultades en torno al proceso de pago y largas colas que se han mantenido en los subsecuentes días.
Agregan que el nuevo esquema inició con tropiezos, y muchas interrogantes sobre el “programa de normalización de la distribución del combustible” anunciado por Maduro, significando además un giro importante en la política de gobierno de las últimas dos décadas.
En la unidad de investigación de Torino Capital destacan que la reanudación en el suministro de combustible se da tras la llegada de los 5 buques cisterna iraníes, con 1,53 millones de barriles de gasolina y otros aditivos; no obstante, explican que la estabilidad en el suministro interno dependerá de si efectivamente se logran reactivar (con apoyo iraní y chino) las refinerías El Palito y El Cardón, que forman parte del Complejo Refinador de Paraguaná.
Considerando las tres modalidades de pago y distribución establecidas, existe una gran interrogante respecto a si el suministro se mantendrá estable, dando a lugar una alta expectativa de escasez, alega el informe presentado por Torino Economics.
Como primer punto, la consultora señala que los problemas emergen en el control del consumo por vehículo, ya que está sujeto a un límite de consumo mensual, el cual esta regulado por el terminal en el número de placa, sin contar con un sistema que permita llevar el control de todos los pagos en sus diferentes formas. Esto presentaría dificultades, abriendo espacios para el surgimiento de la reventa de combustible.
También mencionaron que la implementación del subsidio anunciado por la administración de Nicolás Maduro se realizará por medio del sistema “Patria”, el cual no toda la población se encuentra registrada, aunque se destacó que, quienes no posean el Carnet de la Patria, podrán registrarse en el portal de forma gratuita.
Por otro lado, Torino Economics plantea que la estrategía para el suministro de gasolina genera un riesgo en el surgimiento de grupos revendedores de combustible, dado que ni el transporte público ni el de carga tienen un límite de consumo mensual, y además el suministro se le presta de forma gratuita.
En tercer lugar, se observa una oferta restringida a un número específico de puntos de suministros, 200 bombas en todo el país con un costo de USD 0,50 por cada litro de gasolina.
El informe elaborado por Torino Economics sostiene que el inicio de la flexibilización de la cuarentena y el nuevo esquema para el suministro de gasolina, tiene lugar en un contexto donde existe un incremento de casos de Covid-19, exponiendo a los sectores que se están incorporando a sus labores y propiciando un incremento en la tasa de contagio.
Esto en un país con un sistema de salud sumamente precario, sin las condiciones básicas (como falta en el suministro regular de agua y jabón), además de no contar con la capacidad de respuesta necesaria con relación a los insumos y equipos médicos requeridos para atender este tipo de epidemia.
A su vez, añade la consultora que las precarias condiciones económicas del país hacen que este esquema de distribución de combustible genere grandes distorsiones económicas, estimulando una profundización del mercado paralelo, donde probablemente el precio no se ubicará entre USD 3-4, pero si será mucho mayor al precio oficial, por lo que seguirá siendo un negocio atractivo.
Asimismo, la unidad de investigación de Torino Capital, estima que, tomando en cuenta para el 2018 la circulación de aproximadamente 1,8 millones de vehículos particulares operativos (incluyendo taxis) y 0,11 millones de motocicletas operativas, y asumiendo que ese número se mantuvo constante hasta la actualidad, con un consumo de 60 litros mensual (el cupón más bajo permitido), en el primer mes de suministro se consumirían 114,6 millones de litros. Es decir, se debe consumir 47% del cargamento de gasolina importado desde Irán (243,27 millones de litros) en poco más de dos meses, esto sin contar ningún desvío a otros países.
Ante esta situación, se hace evidente la necesidad de reactivar la producción interna, aún más considerando las restricciones para importar impuestas por las sanciones estadounidenses, lo cual también ha mermado severamente los ingresos petroleros para la importación de bienes y servicios. Además, el Gobierno venezolano busca alternativas mediante la privatización de la cadena de suministro, con el objeto de tratar de saltar las sanciones señaladas mediante la importación por parte de privados.
Por su parte, en cuanto al desmontaje parcial del subsidio sobre el combustible, el Fondo Monetario Internacional (FMI) expuso que es una estrategia similar a la aplicada en Irán en 2010 por el gobierno de Mahmud Ahmadineyad. Sin embargo, señaló que en Venezuela replicar esa estrategia resulta inviable dado que se requiere un equilibrio fiscal, cambiario y monetario, además que no debe ejecutarse de forma aislada de los demás sectores económicos, concluye Torino Economics en su último informe sobre Venezuela.
Cactus24 (13-06-2020)