A las profesionales de enfermería de los municipios Falcón y Los Taques que laboran en Punto Fijo se les está dificultando el desplazamiento hacia sus trabajos y retorno a los hogares ante la falta transporte y efectivo, además conseguir un aventón en paradas, calles o alcabalas es misión imposible si llevan puesto el uniforme porque los conductores pasan de largo ante el temor a contagiarse de Covid-19.
Aunque tienen salvoconductos, a diario se enfrentan a la odisea de conseguir transporte porque los pasajeros temen estar cerca de alguien que haya estado expuesto. “Cuando nos ven con uniforme dicen que tenemos el virus encima”, expresa Yurigma Lugo Díaz quien a pesar de todo, mantiene voluntad y vocación de servir “nuestra prioridad es cumplir el tratamiento a nuestros pacientes como sea”, afirma la técnico superior en enfermería que tiene la guardia nocturna en el hospital Dr. Calles Sierra de Punto Fijo.
Yurigma quien reside en el municipio Falcón, revela que para llegar a su casa ubicada cerca de la bomba de Moruy, ha caminado por horas desde Yabuquiva porque el Transfalcón que les asigna el hospital la deja en la redoma del Taparo, “allí nos bajamos el personal que vive en Los Taques y municipio Falcón, a pedir cola para que nos lleven lo más cerca de nuestras casas (…), es un trayecto muy largo, son muchas horas de camino, también me expongo a todo peligro”, dijo la profesional con seis años en ejercicio.
Comenta que anteriormente el transporte privado de PDVSA y de Zona Franca las auxiliaba desde el municipio Falcón hasta Punto Fijo “pero los trabajadores se quejaron porque ocupábamos sus puestos y no siguieron colaborando»; Agregó, que cuando veían estas unidades pasar en la vía del Táparo y “sacaban la mano para la cola”, ellos —los conductores e inclusive algún trabajador a bordo— gritaban desde la ventana: no las vayas a montar”, afirmó.
Al mismo tiempo, indicó que los militares o policías cuando llegan a un puesto de control a hacer una breve parada o para esperar una “cola” les recomiendan “no usar el uniforme y guardar sus carnets “ustedes saben por el virus”, detalló Yurigma a Cactus24.
Indignada por el mal trato que reciben en la calle, la enfermera manifiesta «así como recibimos a todos los pacientes con agrado y porque es nuestra labor atendemos a todos sin importar qué ropa visten o de dónde vienen porque es su derecho, nosotras esperamos ser tratadas con dignidad».
Lugo Díaz dejó en claro que las enfermeras no se están negando a trabajar ni a cumplir con su jornada bien sea en su guardia diurna, vespertina o nocturna, mucho menos en esta época que hay déficit del personal de enfermería, camilleros y médicos, en lo que sí insiste es en la necesidad de un transporte que las traslade hasta sus pueblos natales.
Con humildad pidió solidaridad al pueblo de Paraguaná “por favor cuando nos vean caminando por los hombrillos de las carreteras, auxíliennos para llegar con bien a nuestro lugar de trabajo o a nuestros hogares para llegar, descansar y regresar para cuidar, resguardar y salvar vidas, en nuestras casas nos esperan hijos y familia, pero en los hospitales nos están esperando nuestros pacientes”.
Fotos Rut Cuauro Chirinos y Cortesía
Cactus24 (01-06-2020)
