En Tailandia, donde criticar al rey, a la familia real y a la monarquía puede costar 15 años de cárcel a cualquier persona, se desató una inusitada ola de críticas hacia el propio monarca, que se encuentra refugiado en Europa mientras el país soporta la crisis del coronavirus.
La furia se desató después de que la prensa alemana revelara que Maha Vajiralongkorn se autoaisló en un hotel-spa de lujo en la ciudad turística alpina de Garmisch-Partenkirchen (Suiza) con un harén de 20 mujeres en un momento en que su país cuenta con más de 1.500 infectados por coronavirus y vio morir a 9 personas.
La revista alemana Bild reveló que, a pesar del hecho de que los hoteles europeos y las casas de huéspedes están cerrados debido al brote de coronavirus, el rey de 67 años –también conocido como Rama X– reservó todas las habitaciones del lujoso Grand Hotel Sonnenbichl para hospedarse con una veintena de mujeres y numerosos sirvientes.
Después del «permiso especial» otorgado por las autoridades del distrito suizo, el hotel organizó la recepción para el rey y su numeroso séquito, aunque no está claro si la reina consorte, Suthida, están en el hotel.
Su última decisión ha provocado la ira de los tailandeses, que no han dudado en recurrir a las redes sociales para expresar su malestar. No entienden como su máximo líder decide alejarse de Tailandia en uno de los momentos más complicados del planeta y encima haciendo gala de la ostentación y la opulencia que le otorga su puesto.
Justo antes de su entronización que se celebró el pasado mes de mayo,el décimo monarca de la dinastía Chakri se casó con nocturnidad y alevosía para permitir así que su última amante pudiera participar en las ceremonias con estatus de reina consorte. La afortunada fue Suthida Tidjai, una antigua azafata de Thai Airways de 40 años.
Cactus24//03-04-2020