El relevo del fuego olímpico fue pospuesto el martes debido a que los propios Juegos de Tokio quedaron aplazados para 2021.
Los organizadores tenían la intención de proseguir con el relevo, a partir del jueves, pese a la propagación del coronavirus.
Pero poco después que el Comité Olímpico Internacional pospusiera oficialmente los Juegos, el presidente del comité organizadores señaló que el relevo no iba a seguir.
“De momento, la llama quedará guardada y se mantendrá a la vista en Fukushima”, dijo Yoshiro Mori.
El relevo iba a comenzar en la prefectura de Fukushima, en el noreste de Japón, sin una torcha, gente que la portara y sin público.
Procedente de Grecia, la llama llegó el 12 de marzo.