Japón debe tomar medidas “valientes y sin precedentes” para vencer las consecuencias económicas del coronavirus, dijo su ministro de Economía, lo que sugiere que está en preparación un paquete fiscal a gran escala como parte de los esfuerzos por evitar una recesión.
Cualquier paquete de gastos se sumaría a las iniciativas del Banco de Japón, que se espera que suavice la política monetaria la próxima semana para amortiguar el golpe del brote del virus y apuntalar la confianza de las empresas en la tercera economía más grande del mundo.
El hundimiento de los mercados financieros ha añadido un carácter de urgencia a las decisiones de los responsables económicos y monetarios.
“El Gobierno y el banco central comparten un fuerte sentido de la preocupación” sobre las consecuencias del coronavirus, dijo el viernes el ministro de Economía Yasutoshi Nishimura, señalando que se está preparando una mezcla de medidas fiscales y monetarias.
“Debemos tomar medidas valientes y sin precedentes”, dijo Nishimura en una conferencia de prensa sobre las medidas que se esperan del Gobierno para mitigar el impacto de la crisis sanitaria en los hogares y las empresas.
El viceministro de Finanzas para Asuntos Internacionales, Yoshiki Takeuchi, dijo a los periodistas que el Gobierno y el Banco de Japón “están listos para trabajar al unísono”, según sea necesario.
“Observaremos los movimientos del mercado con un mayor sentido de urgencia y actuaremos en consecuencia basados en el acuerdo del G7”, dijo el principal diplomático de la moneda del país después de una reunión con sus colegas del Banco de Japón y la Agencia de Servicios Financieros el viernes.
Los comentarios se produjeron después de una conferencia telefónica entre las naciones del Grupo de los Siete, que subrayó el compromiso del grupo para cooperar en la lucha contra el coronavirus.
Los mercados bursátiles mundiales se han derrumbado esta semana ante el aumento de las infecciones, poniendo fin a una carrera alcista que ha durado años, con un pánico vendedor que ha penalizado a casi todas las clases de activos y ha dejado a los inversores sin lugar donde refugiarse. [MKTS/GLOB]
Japón está trabajando en un nuevo paquete de gastos de hasta 20 billones de yenes (190.000 millones de dólares), que incluye desembolsos en efectivo a los hogares y ayudas a las empresas turísticas afectadas por la caída del turismo extranjero.
Sin embargo, el ministro de Finanzas Taro Aso se mostró optimista sobre los movimientos del yen, a los que los responsables políticos japoneses prestan mucha atención debido a la preocupación de que un yen más fuerte perjudique a los exportadores.
“El yen se ha mantenido estable en torno a los 105 yenes recientemente, así que no hay necesidad de preocuparse por ello”, dijo Aso a los periodistas el viernes, describiendo la tendencia subyacente del yen como “estable”.
El yen tiende a subir en tiempos de estrés financiero ya que los inversores ven la moneda japonesa como un refugio seguro contra el riesgo.
Muchos operadores del mercado ven los 100 yenes por dólar como el umbral para decisiones futuras de política monetaria en la política monetaria japonesa.
Cactus24 13-03-20
