Con pocos años en Colombia, Jorge Rodríguez ya tiene un espacio conquistado en el corazón de los antioqueños. Si bien no logró convencer a los paisas a punta de comidas venezolanas sí lo hizo vendiéndoles experiencias mediante las antigüedades.
Desde un viejo tocadiscos, hasta relojes de colección hacen de este espacio un oasis de cultura en una región evidentemente marcada por el turismo, el intercambio cultural y riqueza musical.
Entrar a este emprendimiento denominado «Desde la Nada», es adentrarse a la historia de una familia que ha hecho de la migración un proceso de aprendizajes, logros e intercambios.
Conoce a este venezolano que enaltece el gentilicio de nuestro país junto a su familia proveniente de Maracay, estado Aragua. Para Rodríguez nada es imposible siempre que tengas «las ideas, la pasión y sobre todo las ganas de hacerlo».
Comenzó en un pequeño espacio que hoy está engrandecido por la pasión que le pone a cada pieza que recibe en sus manos. «Aquí la gente está muy apegada a la historia por eso cada pieza que recibo me esmero en conocerla para poder contar lo que en sí misma involucra. Aquí todo tiene una historia y es la que me empeño en contar», asegura con vehemencia.
Desde Medellin la ciudad de la eterna primavera, Jorge Rodriguez les dice a sus compatriotas que le den riendas a sus sueños, que actúen y que sobre todo prueben. «La paciencia es la más elevada de las virtudes», finalizó.
Cactus24 (19-02-2020)
