2020, que a penas va por su cuarto mes, ya hace historia como el segundo año más caliente en la historia de la Tierra, el más caliente jamás registrado en Europa y Asia.
La pieza clave para que se estableciera esta nueva marca climatológica fue el pasado marzo que tuvo una temperatura media, a nivel mundial, y de la superficie del océano de 2.09 grados Fahrenheit (ºF) por encima del promedio del siglo XX, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, en inglés).
En ningún rincón del planeta se han registrado récords de temperaturas frías desde enero de este año hasta esta fecha. Por el contrario, el calor provocó nuevos registros de temperatura en Europa, Asia, América Central y del Sur.
La NOAA, además, registró temperaturas máximas por encima de lo normal en los océanos Atlántico, Índico y Pacífico occidental.
El SNM recoge datos climatológicos desde 1899 el conjunto de datos estadísticos se compara con las mediciones actuales para sacar conclusiones.
“Si pones de perspectiva los más de 100 años que hay de por medio entre 1899 y hoy, en efecto, el hecho de que los datos reflejen este patrón de calor es de carácter significativo”, abordó.
Por el contrario, el Foro de Perspectivas del Clima del Caribe (CariCOF, en inglés) anticipó que por este mes de abril y mayo hay un 40% de probabilidad para que la temperatura esté por encima de lo normal, un 35% para que esté normal y un 25% para que esté por debajo de lo normal para la fecha.
Con los reportes de nuevas marcas en calor suele generarse una preocupación colectiva sobre si el calentamiento global está o no alterando el comportamiento del planeta en maneras en las que el ser humano no tiene control.
La NOAA material educativo necesario para comprender que el evento de la naturaleza es real y que algunos de sus efectos se proyectan en las altas temperaturas, descenso en la cantidad de glaciares en los polos del planeta, sequías y fuertes eventos atmosféricos.
La NOAA no emitió ninguna declaración sobre la proyección de la temporada de huracanes, que comienza en junio, a raíz de los datos sobre el patrón de calor que caracteriza este año. Su informe sobre proyecciones de tormentas y huracanes deberá publicarse en mayo.
