Shay Bradley, de 62 años, ha logrado cumplir su deseo de muerte: hacer reír a su familia y amigos el día de su funeral.
Un hombre de Dublín ha gastado una broma a sus seres queridos el mismo día de su funeral para que creyeran que estaba vivo. Shay Bradley, de 62 años, cumplió su deseo de muerte: hacer reír a su familia y amigos el día de su funeral.
En un vídeo, que ya cuenta con miles de reproducciones en Twitter, se puede escuchar la broma del ex veterano de las fuerzas de defensa irlandesas, un mensaje grabado con antelación por el fallecido. «¿Dónde diablos estoy? Déjame salir. Esto está muy oscuro», es escucha decir al hombre.
<
#shayslastlaugh when your dying wish is to make the ones you love laugh and remember you at your best, now that is pure class. Legend pic.twitter.com/ZTZymjVZOR
— John Gubba (@JohnGubba) October 14, 2019
p>
Shay, que había sufrido una larga enfermedad, preparó la broma hace un año y grabó el mensaje en un teléfono con la ayuda de su hijo Jonathan. Ha contado a la BBC que su padre era «un personaje que durante su vida que siempre quiso hacer reír a la gente».
«Quería hacer algo especial y que lo recordaran tal como era, para que todos, especialmente mi madre, no abandonaran la tumba sombría», explica. Jonathan, de 41 años, ha asegurado que estaba sorprendido por la reacción que el vídeo ha tenido en las redes sociales.
«No me di cuenta de que se estaba grabando en ese momento. Se suponía que era un momento para nosotros como familia. Fue solo cuando me desperté esta mañana que me di cuenta de que había tenido tanto impacto».
Cactus24 (15-10-2019)