El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, instó este jueves durante la inauguración del centro de gobierno de Bataan (Filipinas) a disparar de forma no letal a los funcionarios corruptos; incluso dijo que defenderá tal acción, informa el diario Manila Bulletin.
Tras reconocer que la corrupción se ha convertido en «un gusano dentro de casi todos en el gobierno», Duterte declaró durante su discurso que «si estos tontos», haciendo referencia a los funcionarios corruptos, «piden un soborno, abofetéelos. Si tiene un arma, puede dispararles, pero no matarlos».
El mandatario aseguró que cualquier persona que dispare contra un funcionario que incurra en actos de corrupción únicamente será acusada de causar lesiones y no terminará en prisión. «Solo serán lesiones físicas graves» y «será dejada en libertad condicional», dijo durante su discurso.
De igual manera, Duterte hizo un llamado al pueblo filipino a hacer valer sus derechos y denunciar cualquier acto de corrupción o abuso que involucre a cualquier trabajador o funcionario del Gobierno, reseña RT.
Por otra parte, Duterte dio a conocer que pronto emitirá una orden ejecutiva para mejorar el funcionamiento de las agencias gubernamentales y acelerar el trámite de permisos, licencias y otras solicitudes. Advirtió que los largos tiempos que tardan en emitir la documentación fomenta la corrupción.