Imágenes aéreas muestran a la isla Abaco de Bahamas convertida en escombros tras el destructivo paso del huracán Dorian.
Dorian, que durante el fin de semana se convirtió en uno de los huracanes más poderosos de los que se tiene registro en el Atlántico, causó la muerte de al menos cinco personas en la isla Abaco en el norte de Bahamas e inundaciones antes de un esperado avance a la costa de Estados Unidos, donde se ha ordenado la evacuación de más de un millón de personas.
El huracán se debilitó muy temprano el martes a la categoría 3 en la escala de cinco de Saffir-Simpson, con vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora, informó el centro Nacional de Huracanes (CNH). La tormenta está avanzando hacia el noreste a una velocidad de 1,6 kph, mucho más lento que el ritmo normal de una caminata.
El primer ministro de las Bahamas, Hubert Minnis, indicó que la Guardia Costera de Estados Unidos estaba en el territorio de Abaco y había rescatado a varias personas heridas.
Dorian se movería hacia Florida al final del día, antes de traer sus poderosos vientos y olas peligrosas a lo largo de las costas de Georgia, Carolina del Sur y Carolina del Norte a última hora del jueves.
Dorian podría acarrear subidas del mar en las zonas costeras y algunas partes del norte de Florida y Georgia podrían verse afectadas con marejadas de hasta 2,1 metros, dijo el director del CNH, Ken Graham, quien instó a los residentes obedecer las órdenes de evacuación.