Con un fuerte dolor llegó una joven de 18 años al ambulatorio de La Carucieña al oeste de Barquisimeto, estado Lara. Cuando fue atendida por los médicos de guardia ella expulsó una bebé.
Los médicos tratantes le preguntaron para verificar lo que ya ellos sabían: la joven contestó que se había tomado unas pastillas para expulsar la bebé. De inmediato los galenos de guardia avisaron a funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalística (Cicpc) y acudieron los del Eje de Homicidios, pues se trataba de un aborto provocado y en el país está establecido como un delito.
Los sabuesos le pusieron los ganchos a la joven a quien identificaron como: Michelle Torres. Ella indicó que las pastillas las había obtenido por su cuenta y se las compró a un sujeto desconocido, no quiso dar la identidad. Se pudo conocer que la madre de la joven no sabía lo que sucedía, según informó una fuente cercana al procedimiento.
En medio de los chequeos se constató que se trataba de un feto de sexo femenino que tenía alrededor de 24 a 25 semanas de gestación con un peso de 450 gramos aproximadamente y medía 27 centímetros. El cuerpecito fue trasladado hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto.
La joven de 18 años quien se provocó el aborto ahora se encuentra tras las rejas y recluida en la sede del Eje de Homicidios del Cicpc Lara.