Al menos diez personas, entre ellas tres niños, han muerto en nuevos bombardeos del Ejército sirio esta mañana contra zonas rebeldes del noroeste de Siria, después de una semana especialmente sangrienta para los civiles, con un centenar de fallecidos.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó hoy de que los aviones de Damasco efectuaron casi 40 bombardeos en varios puntos del sur de la provincia de Idlib y el norte de la provincia de Hama, bastiones de los grupos armados opositores.
Nueve civiles, incluidos dos niños, fallecieron en la población de Ariha, en el sur de la provincia de Idlib, donde también se han registrado 28 heridos por los bombardeos de los aviones gubernamentales, según el Observatorio.
Otro niño murió por los ataques aéreos en las afueras de Kafr Auid, también en Idlib, la última región controlada casi en su totalidad por los grupos rebeldes e islamistas.
La ONG con sede en Reino Unido pero una amplia red de colaboradores sobre el terreno, aseguró que la aviación rusa también ha efectuado bombardeos en Hama.
Además, el Ejército sirio también ha realizado ataques de artillería y con helicópteros en la provincia de Alepo, vecina de Hama e Idlib, donde aún hay presencia de combatientes rebeldes.
Por su parte, una fuente militar siria dijo a Efe que el Ejército sirio ha atacado «intensamente» con artillería y misiles, y con el apoyo de la aviación propia y de la rusa, el norte y el noroeste de Hama en las pasadas 48 horas.
Las tropas se disponen a avanzar sobre el terreno hacia las áreas en manos de las facciones armadas, en concreto el grupo islamista Ejército de Al Aza (honor), agregó la fuente que pidió el anonimato.
Esta semana las fuerzas gubernamentales y sus aliados han aumentado sus operaciones militares contra las zonas controladas por los rebeldes en el noroeste del país, donde rige un acuerdo entre Rusia y Turquía (valedora de la oposición) que desde el pasado octubre había reducido las hostilidades.
Sin embargo, a finales de abril la violencia repuntó y esta semana se ha registrado un auge considerable de los ataques aéreos y terrestres sirios y rusos, además del lanzamiento de cohetes por parte de los insurgentes en respuesta a los ataques.
La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, denunció ayer que 103 personas, incluidos 26 niños, han perdido la vida por ataques del Ejército sirio y sus aliados en los pasados 10 días en Idlib y Alepo.
Cactus24 (27-07-2019)