Entre homicidios y resistencias a la autoridad policial se totalizaron 43 personas fallecidas durante junio de 2019 en el estado Anzoátegui, siete menos en comparación a mayo que culminó con 50.
En el sexto mes del presente año, de acuerdo a cifras extraoficiales, unas 18 personas fueron asesinadas a golpes, tiros y cuchilladas, mientras que otras 25 perdieron la vida al presuntamente intercambiar disparos con funcionarios de diferentes cuerpos policiales.
Entre los casos se hallan dos femicidios, el primero ocurrió en el sector El Lindero del municipio Independencia, zona sur de Anzoátegui. Scarleth del Valle Carvajal Sánchez, de 28 años de edad, decidió romper con la relación amorosa que tenía con Reimundo José Salazar Salazar de 51 años.
El hombre, al no aceptar la ruptura, se ensañó en contra de la mujer y la atacó con un cuchillo, con el cual le causó múltiples heridas en su cuerpo hasta matarla.
Por el violento hecho, detectives de la policía científica capturaron al presunto agresor y lo pusieron a la orden de la Fiscalía del Ministerio Público.
El mismo destino que tuvo Scarleth, le tocó a otra dama al sur del estado cuando su expareja la asesinó a tiros cuando se desplazaba en un vehículo en compañía de un amigo.
El sangriento hecho se suscitó al frente de una licorería ubicada en la calle Anzoategui, cruce con Ricaurte de la población de Cantaura, municipio Freites. Misley José Manzano García y Miguel Eduardo Ríos, de 20 y 24 años respectivamente, fueron atacados por un sujeto que accionó un arma de fuego.
El sujeto, cuya identidad se mantiene en reserva, mantuvo una relación con Manzano, quien murió al ser impactada por los proyectiles en el cuello, tórax y hombros, mientras que su compañero Miguel, solo sufrió una herida en la pierna.
Calcinados y tiroteados
En Anaco, dentro de una finca llamada El Remiendo, fueron localizados dos cuerpos calcinados, el de un adulto y un menor de edad.
Ambas víctimas reposaban a orillas de una quebrada. En la morgue de Barcelona, identificaron al mayor como José Gregorio Calvo Figueroa (20) y al adolescente por los apellidos Carvajal Tocuyo (17).
En junio, el hampa cobró la vida del oficial de la Policía Municipal de Peñalver (Polipeñalver) Jeferson González Reyes, a quien encontraron muerto con disparos y cuchilladas en el cuerpo en un canal de agua fluvial de Puerto La Cruz.
El sargento de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) David José Bravo Guaramata (24) también fue otro a quien mataron de dos impactos por proyectil en el pecho, a la altura del sector Los Potocos de Barcelona. El funcionario se trasladaba en un autobús hacia Caracas cuando unos pistoleros atacaron la unidad.
Dos hermanos abatidos
Con relación al número de abatidos en presuntas refriegas, junio obtuvo 25 mientras que mayo contabilizó 30.
Oficiales de Polianzoátegui liquidaron a nueve individuos al igual que las FAES. Por su parte la GNB neutralizó a cinco, Poliguanipa y Polisotillo uno.
Entre estos casos se encuentra el de los hermanos José Alfredo Guevara (29) y Luis Miguel Guevara (20), según la versión policial, perecieron tras supuestamente abrir fuego en contra de las FAES en el barrio Razetti I de Barcelona.
La comisión, integrada por siete uniformados, realizaban patrullaje por el sitio cuando observaron al par de sujetos en actitud sospechosa. Cuando le emitieron la voz de alto, ambos individuos salieron corrieron hacia el callejón La Guarapera del sector Las Cruces donde originaron el enfrentamiento.
Tras el cese de las detonaciones resultaron fallecidos los hermanos Guevara. Sus cadáveres fueron llevados a la morgue de Barcelona donde sus familiares los reclamaron
Cactus24 (04-07-2019)