El viernes 21 de junio murió Héctor Molina de 61 años, uno de los extrabajadores de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que permanecía en huelga de hambre como presión para exigir el pago de pasivos laborales.
El hombre sufrió un infarto cuando se encontraba junto a otros compañeros protestando en la Plaza de la Moneda ubicada en pleno centro de Caracas, informa el diario Tal Cual.
El 30 de mayo 13 extrabajadores de la estatal de petrolera iniciaron una huelga de hambre, arriesgando su vida para hacer un llamado a la administración de Nicolás Maduro, para que autorizara el pago de una deuda de pasivos laborales que se acumuló desde 1997 hasta el 2017.
La responsabilidad de pago fue asumida por el entonces presidente Hugo Chávez, luego de que se llevara a cabo la expropiación del proyecto Cerro Negro, propiedad compartida de la multinacional de Estados Unidos la Exxon Mobil.
Al cumplirse 22 días del inicio de esta huelga la administración de Nicolás Maduro se ha hecho indiferente a este reclamo.
La mayoría de estas personas son de la tercera edad, por lo que las probabilidades de que su situación se complique son altas, ante la falta de alimentación.
Esta situación afecta a más de seis mil trabajadores, la mayoría proviene de estados al oriente del país.