Un descuido de los adultos y una inocente imprudencia terminó en el deceso de Emma Sofía Masy Rubí, de 19 meses. Entró en la jaula del pitbull, mascota de su familia, mientras el animal comía y la mató a mordiscos.
El cuerpo de la pequeña lo encontró su hermana mayor. Según la Policía, la niña fue quien escuchó el llanto de Emma.
Corrió al patio y la halló con mordidas en el cuello y la cabeza. Le avisó a su madre. Pero ya había muerto cuando recibió ayuda.
El hecho ocurrió en una vivienda ubicada en Santa Rita, estado Zulia.
La Policía científica trasladó el cadáver a la morgue y una comisión corrobora la versión de la madre de la niña.
CACTUS24 16-05-19