En la población de Guárico, municipio Morán del estado Lara se registró una situación muy extraña en la que participaron varios cuerpos de seguridad y de la cual terminaron decepcionados de su labor diaria.
Decepcionados y de brazos cruzados se sentían efectivos de la Policía del estado Lara, de la Guardia Nacional, funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) y del Cicpc una vez que tenían en sus manos uno de los procedimientos más grandes ejecutados en el año 2019, se habrían recuperado más de 15 armas largas y cortas, además de vehículos tipos motos y recatados a unas personas que mantenían secuestrada y era al menos 20 los detenidos, pero una orden de arriba hizo que todos fueran liberados y que además se le devolviera su armamento aun cuando el porte de arma está suspendido en el país.
Se trata de una Brigada Comunitaria de Seguridad nacida en la población de Sanare, municipio Andrés Eloy Blanco y que viene operando en el municipio Morán, se pudo conocer que todo comenzó por unas denuncias de unos robos en la población de Guárico y dos policías del puesto salieron hacer un recorrido encontrándose con miembros de la Brigada quienes los secuestraron, los golpearon y hasta los habían despojado de sus armamentos.
Fue cuando se activó la alarma del secuestro que todos los cuerpos de seguridad se movilizaron hasta el poblado y en medio de una operación en conjunto lograron liberar a los policías, rescatar además a seis personas que se trataban de recolectores de café que tenían secuestrados y a quienes supuestamente habían torturados, una vez que se hicieron las aprehensiones y que se llegó al pueblo con todos los detenidos, el supuesto jefe de la Brigada habría hecho algunas llamadas que permitió se dieran las liberaciones de todo y el procedimiento fuera anulado por órdenes superiores.
Karina Peraza Rodríguez/Corresponsalía Lara
