De acuerdo a la cuenta, hasta las 11:59 p.m del 31 de diciembre habían sido llevados al Departamento de Patología Forense 2.568 fallecidos por homicidios, suicidios, siniestros viales, naturales y otros por determinar la causa.
En la lista roja entran 23 funcionarios de distintos cuerpos de seguridad en la región que fueron ultimados, algunos de ellos, en cumplimiento de sus funciones. Y así es como Carabobo ocupa el puesto número cuatro entre los estados con mayor baja de parte de los uniformados.
Uno de los últimos ingresos fue el de Jesús Alberto Márzquez, un joven de 26 años que fue asesinado en Paraparal, Los Guayos, para robarle sus estrenos y un celular.
Según familiares, en la casa de Jesús Alberto no había agua y decidió guardar la ropa y zapatos nuevos en el bolso para ir a donde un familiar a bañarse y alistarse para recibir el año nuevo, pero fue abordado por hombres armados para despojarlo de sus pertenencias. También se llevaron los estrenos que le llevaba a su hija de un año.
Como este caso son muchos los que entran en los más de 2 mil 500 fallecidos en Carabobo durante el año que acaba de terminar, aunque el móvil que más cobra fuerza entre los homicidios es el ajuste de cuentas y venganza, así como resistencia al robo. Un buen número de las estadísticas se les suma los sujetos que han caído en enfrentamientos con los cuerpos policiales.
Heberlizeth González-Corresponsal Carabobo/Cactus24 (02/01/2018)
