El papa Francisco lamentó hoy la reciente masacre ocurrida en la República Democrática del Congo y criticó el «silencio vergonzoso» internacional que favorece la perpetuidad de los conflictos en el país y la muerte de inocentes que carecen de «peso en la opinión mundial».
«Mi pensamiento va hacia los habitantes del Nord Kivu, en la República Democrática del Congo, recientemente golpeados por nuevas masacres que desde hace tiempo se perpetúan gracias a un silencio vergonzoso y sin llamar nuestra atención», dijo Jorge Bergoglio, desde la ventana del palacio apostólico vaticano.
«Forman parte, por desgracia, de tantos inocentes que no tienen peso en la opinión mundial», agregó.
Además, condenó «las ansias y los dolores de las poblaciones que en tantas partes del mundo son víctimas inocentes de persistentes conflictos».
Según informa hoy la página vaticana Radio Vaticana, un grupo de hombres armados ha asesinado a al menos cincuenta personas en Nord Kivu, cerca de la frontera con Uganda.
Las autoridades de Kinshasa atribuyen la masacre al grupo islamista ugandés de las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), aunque según un misionero que ha relatado lo ocurrido al Vaticano, este escuchó hablar a los agresores en la lengua de los soldados congoleños.