El hombre que apuñaló a seis personas el miércoles en la Russell Square de Londres era un noruego de origen somalí, indicó el jueves la policía local, que no encontró indicios de radicalización en el agresor.
La investigación «apunta cada vez más a problemas de salud mental» como motivo del ataque, indicó el comisario asistente Mark Rowley.
En el ataque murió una persona, a la que Rowley identificó como una mujer estadounidense. Los cinco heridos eran de nacionalidad británica, estadounidense, israelí o australiana. Ninguno sufrió lesiones que pongan en riesgo su vida.
La policía aumentó el jueves el número de agentes en las calles de Londres, después del ataque, registrado apenas unos días después de las autoridades alertaran al público de que esté alerta ante los ataques inspirados por el grupo Estado Islámico en otras partes de Europa.
El ataque ocurrió en torno a las 10:30 de la noche del miércoles en la céntrica plaza de Russell Square, una zona llena de estudiantes y turistas.
La policía dijo haber recibido «numerosas» llamadas del público sobre un hombre que estaba atacando a la gente con un cuchillo en las calles en torno a la plaza, reseña la agencia AFP.
Los agentes emplearon una pistola paralizante para reducir al sospechoso de 19 años, que fue detenido como sospechoso de asesinato.
Helen Edwards, de 33 años y que vive en la zona, salió para dar un paseo y encontró policías equipados con armas de fuego cerca de una estación de metro. En una ciudad que aún tiene fresco el recuerdo de los atentados del 7 de julio de 2005 contra el transporte público, Edwards dijo haber sospechado de inmediato que se había producido un ataque.
«Siempre está eso en un rincón de tu cabeza», comentó. «Uno vive con esa amenaza de terrorismo u otros crímenes en un rincón de la cabeza. Supongo que no fue una gran sorpresa».
Ellie Cattle, de 21 años, estudiante que se aloja en un hotel cerca de la plaza, dijo que había oído a la policía gritar «¡Suéltalo, suéltalo!».
Cactus24 (04/08/2016).
