El delirio tremens del gobierno por impulsar a como dé lugar el “diálogo” solo evidencia un secreto a voces ¡Su desespero! tanto que, crítico artero de los líderes de la iglesia venezolana, hoy recurre a su más alta investidura, el Vaticano. El asunto es que en cualquier democracia el dialogo y la institucionalidad son la clave, pero en Venezuela durante los últimos 17 años las instituciones se partidizaron, la constitución es un comodín gubernamental… el dialogo solo ha servido para darle tiempo al gobierno para reflotar en momentos de crisis, así lo hizo Chávez en la crisis de gobernabilidad 2002-2004 y Maduro en el 2014.
El Referéndum Revocatorio (RR) es hoy la vía más racional, legítima y de idoneidad constitucional para solucionar la alargada agonía político-económica que vapulea a los venezolanos, pues es el pueblo quien debe decidir sí seguir por el camino que llevamos, con mismos protagonistas/proyecto o sencillamente decir ¡Basta! para dar paso a otra propuesta de país, otra dirección. La MUD debe estar consciente de esto: El RR es el epicentro de la Venezuela del mañana, debe ser INNEGOCIABLE.
Mientras contó con un barril por encima de 100$ el gobierno fue indolente, garrotero, superlativamente altanero, jamás consideró en lo más mínimo las advertencias de todos los sectores nacionales que preveían lo que hoy nos está ocurriendo, la bonanza petrolera permitía al gobierno indemnizar al pueblo (vía presuntas política sociales) de las consecuencias de sus errores, omisiones y un despilfarro/corrupción no investigado. Al acabarse la bonanza de petrodólares quedaron visibles los estragos, un pueblo afligido por las consecuencias de una prolongada conducción nacional retrograda, por el producto más representativo de la economía chavista el “Bachaqueo” y un gobierno mendigando dialogo pero para negociar ¡Allí está el detalle!
¡Cuidado! En los diálogos se negocia, en Venezuela la oposición no tiene absolutamente nada que “dialogar” pues TODOS los escenarios factibles le otorgan contundentes victorias, un ganar-ganar ipso facto, así los venezolanos vemos con malos ojos el presunto dialogo, sencillamente porque el gobierno intentará negociar en terrenos ya perdidos, ofrecerá de todo para evitar que el RR se celebre este año lo cual sería fatídico para el país.
La reinstitucionalización del país, la libertad de los presos políticos, la redirección política, económica y las reivindicaciones sociales necesarias se pueden alcanzar muy pronto ¡este mismo año! a través de un cambio de gobierno vía referéndum revocatorio. Con el diálogo el gobierno solo busca alargar su permanencia en el poder y evadir/mitigar sus responsabilidades, pero no tiene nada que ofrecer, lo que tiene es en base a arbitrariedad e inconstitucionalidad que con cambio de gobierno también perdería. Finalmente, con el dialogo la MUD se autocondicionaría lo que ya tiene ganado, a parte, perdería los pantalones ¡No tiene el menor sentido! a menos que tenga por objeto el chanchullo ¡Mosca!
@leandrotango
